Cuando tenés hijos tu casa se renueva. Lejos quedó la época donde todo estaba ordenado y en su lugar, tanto que parecía sacada de una revista de decoración o la mismísima Casa Foa.
Estilo minimalista donde desparecieron todos los adornos entre rotos y perdidos; arte rupestre por todas las paredes con tintes naturales de dulce de leche, chocolate y tierra, sumado a hermosos jeroglíficos en marcador indeleble.
Y como toque final la adorada alfombra que te costó tanto conseguir convertida en un emblema del animal print, donde ya no le entra ni una mancha más!!
Y si ésto no es arte, el arte donde está???

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